Domingo de la Ascensión-2024
AL CIELO SE ENTRA DESDE ABAJO
MARI PAZ LÓPEZ SANTOS, pazsantos@pazsantos.com
MADRID.

ECLESALIA, 10/05/24.- El ambiente era de expectación. Día a día iban detectando que algo iba a pasar pero que realmente les deba miedo de preguntar. Como tantas veces mejor no saber y ya se irá viendo. Mejor ojos abiertos y boca cerrada.

¿Cómo iban a entender aquello de “os conviene que yo me vaya”? (Jn 16,5-11).

Preparabas, a los que te habían seguido, a tu cercana despedida; que no era el fin sino una espera a la que todavía no podían poner nombre. “Muchas cosas me quedan por deciros, pero no podéis cargar con ellas por ahora” (Jn 16, 12-15). No estaban preparados. ¿Quién lo está?

Cómo cargar con esas explicaciones abstractas: “Dentro de poco ya no me veréis, pero dentro de otro poco me volveréis a ver” (Jn 16, 16-20).Imagino sus caras preguntándose qué es ese “poco”.

Ese “poco” es un instante de comprensión interior que vuelve la tristeza en alegría, el desasosiego en gozo y la incertidumbre en certeza y esperanza.

Instante en el que se reconoce la semilla que el Sembrador dejó prendida en el hondón del alma desde el minuto cero de nuestra existencia. Que no es para mantener en conserva sino que ha de convertirse en fruto en medio del mundo: “Id al mundo entero y proclamad el Evangelio a toda la creación”. Cada cual donde le sople el Espíritu.

Ellos no sabían, como tampoco nosotros, que al cielo se entra desde abajo (Eclesalia Informativo autoriza y recomienda la difusión de sus artículos, indicando su procedencia. Puedes aportar tu escrito enviándolo a eclesalia@gmail.com).